Ha fallecido hace poco más de tres horas el que fue uno de los pocos políticos peruanos decentes de este país, siempre fiel y consecuente con sus ideas, un intachable hombre de gran nobleza y que jamás se le agachó la cabeza a ningún gobierno. Se llamaba Javier Diez Canseco Cisneros.
Nació el 24 de marzo de 1948 en la ciudad de Lima, en una acaudalada y adinerada familia limeña, por lo cual vivió una infancia acomodada. Pero fue la poliomielitis que sufrió desde que tenía un año de nacido la que le permitió ver el mundo diferente. Su continuo tratamiento en el Hospital San Juan de Dios le permitió entrar en contacto con la realidad del país: la pobreza que él no veía en su mundo de riqueza, por lo cual desde muy joven asumió una postura ideológica contraria a toda forma de vida acaudalada y oligárquica, y acogió así al Marxismo como ideología.
Estudió derecho en la Universidad Mayor de San Marcos y sociología en la Pontifica Universidad Católica del Perú. Militó en las filas de la agrupación Vanguardia Revolucionaria junto a otros jóvenes universitarios, habiéndose ya convertido en presidente de la Federación de Estudiantes de la PUCP. Fue expulsado a Argentina por el gobierno militar de Francisco Morales Bermúdez y luego huyó a Francia, pero regresó en 1978 para postular a la Asamblea Constituyente de ese año durante el final de la dictadura del general Morales Bermúdez
Por esos años, Javier Diez Canseco pasa a formar parte del Partido Unificado Mariateguista, el cual se había formado con la unión de la Unidad Democrática Popular y del Partido Comunista Revolucionario. Y posteriormente, con el propósito de formar un frente amplio para las elecciones de 1985, el Partido Unificado Mariateguista se une al frente político Izquierda Unida, alianza que agrupaba al Partido Comunista Peruano (PCP), Partido Comunista del Perú - Patria Roja (PCP-PR), Partido Socialista Revolucionario (PSR), Unión de Izquierda Revolucionaria (UIR) y al Frente Obrero Campesino Estudiantil y Popular (FOCEP). Pero la alianza, con Alfonso Barrantes Lingán como candidato, pierde las elecciones en 1985 contra el candidato aprista Alan García Pérez, pero Diez Canseco logrará salir electo como senador, habiendo sido ya diputado entre 1980 y 1985.
En 1989 la alianza Izquierda Unida vuelve a lanzar su candidatura a la presidencia, esta vez con Henry Pease García a la cabeza. Sin embargo, la alianza vuelve a perder las elecciones y sale electo Presidente el candidato Alberto Fujimori Fujimori, quien en abril de 1992 realiza un autogolpe contra su propio Gobierno para tomar el control del Parlamento y de los medios de comunicación. Esa misma noche la casa de Javier Diez Canseco será dinamitada por órdenes del gobierno fujimorista con el fin de acabar con su vida y de amedrentar a los parlamentarios de izquierda. Es así que con la Constituyente de 1993, el dictador Fujimori toma el control del país y en las elecciones de 1995 sale victorioso fraudulentamente. Diez Canseco, quien ya era un acérrimo opositor suyo no será reelecto congresista y la alianza Izquierda Unida desaparecerá debido a la intensa represión, opresión y persecución ejercida por el gobierno fujimorista contra los políticos y dirigentes de izquierda en lo que fue una guerra sucia en contra de todas las organizaciones populares, civiles y políticas contrarias al régimen de Fujimori. Durante aquella época, en 1996, Diez Canseco será secuestrado por el Movimiento Revolucionario Túpac Amaru (MRTA) durante la toma de la Embajada de Japón, pero tras un par de días será liberado y empezará una constante petición por el diálogo entre los revolucionarios y el gobierno.
Pero una vez caída la dictadura de Alberto Fujimori Fujimori, y sacados a la luz las violaciones de Derechos Humanos y los actos de corrupción de su régimen, Javier Diez Canseco se involucrará en investigar las violaciones a los Derechos Humanos cometidas tanto por el régimen de Fujimori como por las cometidas por el Partido Comunista del Perú - Sendero Luminoso (PCP-SL).
Así, en 2001 se lanza como candidato para el Congreso de la República por Unión por el Perú, partido político fundado por el exsecretario general de la Organización de las Naciones Unidas, Javier Pérez de Cuéllar, siendo electo congresista.
Luego, en las elecciones presidenciales de 2006 se lanza como candidato para la presidencia por el Partido Socialista del Perú, del cual fue fundador ese mismo año a través del Partido Unificado Mariateguista. Pero no logrará alcanzar la presidencia, saliendo vencedor el candidato y expresidente Alan García Pérez.
Y, finalmente, en 2011 apoyó la candidatura presidencial de Ollanta Humala Tasso uniéndose a la alianza de este: Gana Perú, el cual agrupaba tanto al Partido Socialista del Perú como al Partido Comunista del Perú, Partido Socialista Revolucionario, Movimiento Político Voz Popular y el Movimiento Político Lima para Todos. Humala saldría victorioso siendo elegido Presidente de la República y Diez Canseco lograría ser electo congresista con la tercera candidatura congresal más votada. Pero la alianza entre él y el humalismo no duraría mucho, y tras ser insostenible e innegable el viraje del Presidente Humala hacia la derecha, traicionando no solo a la izquierda sino también a sus propios votantes, Diez Canseco se separa de la alianza Gana Perú y pasa a ser independiente en el Congreso.
Como tras la dictadura fujimorista, Diez Canseco se dedicará a su labor de fiscalizador y a la investigación de actos de corrupción. Pero será malintencionadamente suspendido de sus funciones congresales en noviembre de 2012 tras ser acusado de intentar beneficiar a su hija y exesposa con la promulgación de la Ley N° 054/2011, a pesar de aquella haber sido presentada como proyecto de ley anteriormente por varios congresistas de distintas bancadas. El objetivo era claro: callarlo por haberse convertido en enemigo del régimen humalista al denunciar su viraje hacia el neoliberalismo. En su contra estuvieron el fujimorismo, el aprismo y también los que fueron sus compañeros en la bancada oficialista de Gana Perú: el humalismo.
Pero su más ardua lucha llegaría recién este año, cuando en febrero de 2013 anunciara vía una carta que sufría de cáncer. Fue hospitalizado a finales de enero de este año, pero su cáncer ya estaba al parecer demasiado avanzado. Y a las 22:15 horas del sábado 4 de mayo de 2013 falleció.
Fue sin lugar a dudas el político peruano de izquierda más influyente y activo de las últimas décadas, no solo por su ferviente posición insurrecta ante cualquier violación de los Derechos Humanos y contra cualquier tipo de atropello contra los derechos ciudadanos por parte del Neoliberalismo, del Liberalismo y del Capitalismo, sino porque fue sobre todo un hombre coherente con sus ideas, fiel a sus ideales y nunca fue lacayo de nadie. Y es por eso que hoy el Perú ha perdido a un gran político, a un coherente izquierdista y, sobre todo, a un excelente ser humano.
Reportaje del programa Punto Final en homenaje a Javier Diez Canseco Cisneros:
Reportaje del programa Abre los Ojos en homenaje a Javier Diez Canseco Cisneros:
Domingo 5 de mayo de 2013
GianGian Producciones
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